¡Por favor! ¿Entrando en el mes de agosto y ya me viene a la cabeza la Navidad? Pensándolo bien, eso puede ser por varios motivos:
- Añoro el frío: buena teoría, habida cuenta de la ola de calor espantoso que nos azota al salir de cualquier edificio con aire acondicionado…
- Me encantan los turrones (y con la “operación bikini” que me acabo de infligir, me merezco de premio una barra entera de jijona).
- Me estoy haciendo mayor y ya quiero tenerlo todo atado para poder pasar el fin de año donde quiero, y no donde queden plazas… Supongo que eso es bueno, no? Hagamos la prueba!
Te propongo cuatro ideas de viaje: dos a los mercadillos navideños, y dos más para pasar el fin de año. Esta vez, cada propuesta viene con sus actividades TOP de la temporada!